Tradicionalmente se confunden los términos cemento y hormigón.
Vamos a ver como lo explicamos, para diferenciar que son dos cosas diferentes.
Técnicamente, el cemento es un conglomerante formado a partir de una mezcla de caliza y arcilla calcinadas y posteriormente molidas, que tiene la propiedad de endurecerse al contacto con el agua. El producto resultante de la molienda de estas rocas es llamada clínker y se convierte en cemento cuando se le agrega una pequeña cantidad de yeso para que adquiera la propiedad de fraguar al añadirle agua y endurecerse posteriormente.
Ahora bien el, si el cemento lo mezclamos con agregados pétreos (grava y arena) y agua, crea una mezcla uniforme, maleable y plástica que fragua y se endurece adquiriendo consistencia pétrea denominada hormigón. (en España, parte de Sudamérica y el Caribe hispano) o concreto (en México, Centroamérica y parte de Sudamérica).
Su usó está muy generalizado en construcción e ingeniería civil.
Por lo tanto, el cemento es uno de los 4 ingredientes para fabricar hormigón (cemento, arena, grava y agua)
Receta de hormigón = cemento + arena + grava + agua.
Por último es necesario comentar, que si a la receta anterior le quitamos la grava, conseguimos un producto diferente y también un básico de la construcción, el «mortero» también conocido como argamasa (cemento, arena y agua) principalmente se usa para fachadas y para poner ladrillos.
Receta de mortero = cemento + arena + agua.
¡Espero haberles sido de ayuda!
Autor: Rubén Ureta